domingo, 7 de octubre de 2012


Volver a soñar, que sea mi príncipe azul, que alcance la perfección, que me convierta en la persona más feliz del universo. Sólo él consigue despistarme de mi rutina diaria, me hace olvidar todo lo demás. Me quita tiempo y me da vida. Sigue siendo el mismo de siempre y sigue tratándome como a una reina. Es lo mejor. Que la única que falla soy yo, porque no me supe disfrazar de la princesa de sus sueños. Pero que aún así, sigue estando, y ¡nadie sabe cuánto me gusta esto!